El chaleco salvavidas es un elemento de seguridad fundamental en toda embarcación. Específicamente cuando hay bebés, este elemento de flotación es vital y necesita cumplir con requisitos para que sea realmente seguro.
Debido a que los bebés son los más vulnerables porque no pueden valerse por sus propios medios ni reaccionar en caso de caída al agua, deber iniciar la navegación con el chaleco salvavidas colocado.
Los chalecos salvavidas para bebés son fáciles de colocar y de manipular. Pero, de todas formas, siempre es bueno practicar su uso previamente para estar prevenidos y saber cómo reaccionar frente a una eventual emergencia.
El material de los chalecos salvavidas para bebés es resistente y posee tiras reflectantes y cuellos abatible.
Un bebé en el agua requiere atención continua. Basta apenas un segundo de distracción para que caiga al agua o se produzca una accidente. Por lo tanto, además del chaleco salvavidas, es fundamental cuidar todo el tiempo del pequeño. Y llevarlo siempre a upa durante la navegación o en zonas recreativas cercanas al agua.
Siempre tiene que haber una persona adulta a cargo, especialmente si hay un grupo numeroso. Es importante delegar el cuidado en una persona en particular.
Otra recomendación de los especialistas es vestir al bebé con ropas llamativas para poder visualizarlo y localizarlo en caso de caída al agua.